Cansado del ritmo de la ciudad, se le ocurrió irse a la playa en julio. Mala idea si buscas relajación. Buena idea para una nueva canción.
Es tan desagradable ver a tanta gente amontonarse en un espacio lleno de arena caliente junto a un charco de agua salada para bañarse en los rayos del sol o en el orine con sal al que llaman mar. Por supuesto que no se va uno a la playa para esa cochinada. Eso solo le gusta a los niños, que no tienen prejuicios y tienen el poder en nuestros hogares... los únicos capaces de ganar discusiones con la mujer de uno, comprobado científicamente. La verdadera razón por la que uno va a estos sitios es para contemplar los cuerpos semi-desnudos de las señoritas que no les da pena usar pequeños bikinis (gracias a Dios), pero que se rehusan a andar en ropa interior frente a los desconocidos... totalmente ilógico, sobre todo teniendo en cuenta que estos trajes de baño son infinitamente más reveladores (una vez más, gracias a Dios) que la profana y violadora de la castidad lencería.
- Mijo, cómo calienta el sol aquí. - decía una señora.
- ¡Eureka! - dijo nuestro protagonista.
- No, mijo, yo me llamo Eugenia.
Al protagonista de esta historia, que lo conocen tu mujer y tu suegra, le faltaba inspiración para su próximo hit. Cansado de la contaminada ciudad de México, se retiró unos días a su apartamento en la también contaminada Acapulco ¡Brillante!
Calentó el maldito solo en la playa y a este joven solo se le pudo ocurrir del gigante astro que hizo a la señora, que seguramente se veía muy mal en su traje de baño quejarse.
Que si calentaba el sol, que si el mar estaba frío, lo que a Luis Miguel le importó fue que sentía "su palpitar cerca". Así nació "Cuando Calienta El Sol"... Al rato se dio cuenta que ya la habían escrito los hermanos Rigual. Al fin y al cabo un cover no está mal ¿eh? (Mejor es "La Incondicional").
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